lunes, 1 de diciembre de 2008

Taberna Regina, Cordoba. Plaza Regina.





El pasado Domingo, decidimos dar una vuelta por las callejuelas de Cordoba, como hacia buen tiempo y no demasiado frio, decidimos irnos a una terraza a tomarnos algo, y por supuesto, acabamos en la Plaza de la Corredera, pero claro, nosotros no eramos tan originales, y por supuesto, no eramos los unicos en esta ciudad a los que se les habia ocurrido ir a esta plaza. No cabia un alfiler, todas las mesas ocupadas, todos los bares a reventar... claro que luego dicen que si hay crisis, pero en La Corredera no deben de leer la prensa ni ver las noticias, por que lo que alli se demostraba, era todo lo contrario. Pero bueno, con nuestro plan de tomarnos unas cervezas al solecito, frustrado, decidimos ir para la Taberna el Juramento... ni que decir tiene que nos encontramos con el mismo problema, alfinal, callejeando llegamos a la Plaza Regina.
Esta plaza goza de u
n encanto personal, con su fuente de agua fresca y sus naranjos para dar sombra, no es raro encontrar a cualquiera sentado tranquilamente en unos de sus bancos. Y en medio de esta postal, nos encontramos La Taberna Regina, no fue un descubrimiento, ya que hemos ido varias veces.
El local, uno de los mas antiguos de Cordoba, conserva todavia un patio de los tan tipicos en esta ciudad, encalado, con macetas de geranios y gitanillas, nos podemos sentar en el a tomar una caña tranquilamente.
Para los dias de frio, esta taberna cuenta con habitaciones independientes con braseros en las mesas y azulejos sevillanos en las paredes. Es sin duda, una TABERNA TABERNA como las de antes.
Esta taberna esta muy bien para tomarse una caña con unas aceitunitas, digo lo de las aceitunas por que estas no son manipulables. Con esto me refiero, a que si sois unos amantes del riesgo o de los juegos de azar este es vuestro sitio.
Me explico, la carta del Regina, no es muy amplia que digamos, pero recoge todos aquellos platos mas tipicos de la gastronomia Cordobesa, pero eso si, pedir algo de comer aqui puede llegar aser una loteria, ya que de cada diez dias, puede que uno la comida este bien. Normalmente, cuando vas tres veces y pides el mismo plato... digamos por ejemplo una racion de callos o carne al jerez, nunca nunca saben igual, cuando la salsa no esta caldosa (para cuchara) la carne esta mas dura que una piedra, cuando pides patatas bravas, lo mas normal es que sepan a recocinadas, vamos una autentica ruleta rusa.
Dejando a un lado, la carta, que ademas he de añadir que no tiene los precios puestos, ya que dependiendo de como le caigas al Lolo, el dueño, te cobrara mas o menos. (Dicho por el mismo). Si le caes bien, te cobra su precio, y si le caes mal.... pues tu me diras.
A lo que iba, dejando a tras la carta, en este local, a parte del dueño, al que no es muy dificil encontrar, digamos que un poco ebrio, trabajan entre una o dos personas mas, hay un señor, trabajando en esta taberna, que si no me confundo se ocupa de la cocina, al que no es muy dificil verlo con una racion de comida en la mano y la colilla del cigarro en la boca, creo, que mas de una vez lo clientes comeran comida con ceniza. Ni que decir de las uñas de este señor, que no han conocido el jabon en la vida. Vamos, lo que se refiere al personal, entre el dueño bebido un dia si otro no, y el señor este tan poco aseado y fumador, a uno se le quitan las ganas de ir.
Por otro lado, tenemos la higiene del local, a los que hemos pasado alli muchas horas bebiendo cerveza, nos han pasado por delante cosas que jamas hubieras imaginado ver en locales de estos, insectos, roedores y alguna que otra cosilla mas. Luego por otra parte, tenemos los aseos, que estan... bueno, con el olor que desprenden es suficiente explicacion. Para los enamorados de los patios cordobeses, recordar que los baños estan en el patio. Que luego no haya sorpresas.
Resumiendo, si no eres muy escrupuloso, si no te dan miedo los bichos y no te importa pagar mas o menos dependiendo del humor del dueño, este es tu sitio de tapas!!!
Nosotros de todas formas, recomendamos reservar mesa en el Juramento, del que ya hablaremos otro dia, y mientras tomarte una cerveza en la terraza del Regina, que vienen precintadas.

Fdo. Un Señor de Cuenca.